Artículo de opinión firmado por José Francisco Alfaya de Decimononic y 925lab.
Esta breve reflexión surge a raíz de un recomendable artículo firmado por Germán Pajares y publicado en el diario sectorial Gold&Time. Te invito a que comiences por leerlo: "¿En que se diferencian los grandes joyeros?".
¿Ya lo has leído? Entonces sigamos adelante.
¿Diseño, innovación, exclusividad? Tres adjetivos aplicables a los tres diseñadores mencionados por Germán, aunque es cierto que unos han sido más innovadores que otros en aspectos técnicos, no tanto en diseño (puesto que en este ámbito los tres han destacado a lo largo de sus carreras profesionales). Nos estamos refiriendo a creadores con una dilatada trayectoria que fueron capaces de consagrarse como "estrellas" de la joyería de autor más exclusiva en un mundo pre-internet y han sabido mantener esa merecida posición de primacía desde entonces.
¿Han conseguido diferenciarse en el saturado mercado internacional de la alta joyería de autor? Desde luego, eso es indiscutible. ¿Cómo? Yo diría que cada uno de ellos ha desarrollado una diferenciación relevante gracias al hecho de consolidar, de forma más o menos intuitiva, una propuesta de valor atractiva para cierto perfil de cliente. Algo que es muy fácil decir y muy difícil conseguir.
¿Diseño? Todos ellos han acuñado un estilo propio, aunque en este caso comparten una fuente de inspiración muy clara: el mundo natural. Y todos ellos se caracterizan por su maestría técnica.
¿Innovación? Por supuesto, algo que suele ir de la mano con el diseño y la maestría del oficio. Introducción de nuevos materiales, perfeccionamiento de técnicas pre-existentes... e innovación también en muchos otros ámbitos, como en los canales de difusión y comercialización de sus productos.
¿Exclusividad? El epítome del lujo (y no olvidemos que estamos hablando de joyería de gran lujo). Materiales extraordinarios y piezas con precios exorbitantes, al alcance de muy pocos. Escasez, ya que su capacidad de producción es limitada (y eso es una decisión deliberada, claro). Prestigio, ya que ser propietario de una de esas piezas se traduce en formar parte de un pequeño y selecto grupo de connoisseurs. Y, en última instancia, de eso va el mercado del lujo.
Si quieres saber más sobre diferenciación en el contexto empresarial, te recomiendo este artículo de Javier Megías: "Sólo hay 3 formas de diferenciarse". Los tres diseñadores mencionados por Germán han apostado por ser únicos y lo han conseguido, por eso han triunfado. Pero ojo, ese "únicos" no hace referencia tan sólo a su capacidad como diseñadores y artífices joyeros (que también), sino a su capacidad global como empresarios.
En un mercado internacional en el que la oferta supera con creces a la demanda, desarrollar una diferenciación competitiva que sea relevante resulta crucial para hacerse hueco en el mercado (léase "posicionarse con éxito"). Lo cierto es que el universo de la joyería de autor no está al margen de esta circunstancia y por eso, a mi entender, las organizaciones que representan los intereses colectivos del sector, como la Asociación Joyas de Autor, son más importantes que nunca. Promover la profesionalización y la capacitación en nuestra industria es algo primordial para potenciar la competitividad en un mercado mundial cada vez más inter-dependiente y exigente, más que nada porque esto no afecta tan sólo a las "vacas sagradas" de nuestro sector, sino a todos sus agentes. Es decir, cualquiera que aspire a prosperar necesita tener muy claro qué ofrece y a quién debería importarle.
¿Quieres saber cómo puede ayudarte la Asociación Joyas de Autor a alcanzar tus objetivos? Entonces echa una ojeada a esta sección de la web de la AJA: "Propuesta de valor para diseñadores de joyas de autor". Y si esto te ha parecido interesante, súmate a todos los profesionales de la joyería de autor que reciben ya el boletín de la AJA: suscríbete a nuestro newsletter.