Segundo premio concurso “Los nerones de ayer y de hoy”.- Collar «La infancia perdida» por Noemí Prada

Noemí Prada - Collar "La infancia perdida"

Todos conocéis nuestro certamen temático de diseño "Concurso de Diseño de Joya de Autor AJA · Madrid Joya", que es exclusivo para los miembros de la AJA y que este año ha tenido como tema "Los Nerones de ayer y de hoy".

Hoy tenemos el placer de compartir con vosotros el análisis del diseño que ha obtenido el segundo premio, el collar "La infancia perdida" creado por Noemí Prada. Desde la Asociación Joyas de Autor (AJA) queremos transmitir nuestra más sincera enhorabuena a la autora por este reconocimiento.


Collar "La infancia perdida"

Autora

Noemí Prada

Titulo de la pieza

La infancia perdida.

Tipo de joya

Collar multiposición.

Materiales

Plata de ley, arcilla polimérica, esmaltes y acrílicos.

Descripción

Pieza inspirada en los niños sirios que han tenido que abandonar su país desde el comienzo de la guerra civil Siria huyendo de la violencia. El mayor éxodo de refugiados desde la Segunda Guerra Mundial.

Memoria técnica

Para realizar ésta pieza, comencé partiendo de un diseño formado por diferentes piezas que unidas crearían un joya conjunta.

Columna

Para crearla, partí de un trozo de cera que modelé hasta conseguir la forma deseada.

Después de su microfusión, la repasé y vacié su interior; adapté una chapa de plata de ley de 0.8 mm y la soldé en su parte inferior.

A continuación, soldé una argolla para que luego pudiera ser utilizada opcionalmente como colgante.

Abeja

Para las abejas, también utilicé la técnica de modelado a la cera perdida.

Una vez obtenidas en metal, las repasé y soldé una anilla a cada una de ellas para que luego pudieran engancharse al resto de las piezas en cadena.

Para su acabado, utilicé esmaltes fríos para proporcionarles los colores deseados.

Mosaicos

A la hora de realizar los mosaicos, estiré chapa a 0.8 milímetros de grosor y después de coger las medidas de cada uno de ellos, con la ayuda de unos alicates, contorneé sus formas irregulares. En la parte inferior de cada uno de ellos, soldé una chapa del mismo grosor y dos medias anillas en ambos lados.

Para poder convertirlos en broches, realicé dos tipos diferentes de cierres. Dos de ellos van soldados a un imperdible, que hice de la siguiente forma: estiré hilo a 0,9 décimas de grosor; después doblé el hilo por un extremo para hacer el gancho lo volteé en forma de espiral dos veces en paralelo y se lleva al gancho del imperdible, se saca punta para que sirva de aguja.

Los otros dos mosaicos sueldan dos pasadores en forma de horquillas, que se forman mediante un hilo cuadrado laminado al que también damos forma con unos alicates hasta conseguir una buena sujeción.

Los pulimos y en su interior adaptamos diferentes diseños de mosaicos que se forman mediante trocitos cuadrados de arcilla de 0,5 milímetros que se encolan uno a uno hasta alcanzar la forma apropiada.

Para su acabado, pintamos con acrílicos los dibujos escogidos.

Por último estiramos hilo redondo a 1,2 décimas para formar las anillas y crear una cadena.

Unimos todas las partes ayudándonos de unos alicates y obtenemos la pieza final.

Los otros dos mosaicos sueldan dos pasadores en forma de horquillas, que se forman mediante un hilo cuadrado laminado al que también damos forma con unos alicates hasta conseguir una buena sujeción.

Los pulimos y en su interior adaptamos diferentes diseños de mosaicos que se forman mediante trocitos cuadrados de arcilla de 0,5 milímetros que se encolan uno a uno hasta alcanzar la forma apropiada.

Para su acabado, pintamos con acrílicos los dibujos escogidos.

Por último estiramos hilo redondo a 1,2 décimas para formar las anillas y crear una cadena.

Unimos todas las partes ayudándonos de unos alicates y obtenemos la pieza final.

Los políticos desde tiempos pasados hasta la actualidad, debido a su egocentrismo, han teñido de negro diversas situaciones conflictivas en la que la sociedad se ve afectada directa e indirectamente por sus propios intereses.

Uno de los enfrentamientos más intensos vividos recientemente es la guerra civil Siria.

A través de esta pieza quiero reflejar la situación que han vivido más de cuatro millones de sirios que han tenido que abandonar su país huyendo de la violencia desde que comenzó esta guerra. Más de la mitad de ellos son niños.

Su diseño se descompone, pudiéndose llevar de seis formas diferentes. Cuatro broches , un colgante y en su conjunto como gargantilla.

La columna central, representa la destrucción arqueológica de Palmira.

Cada uno de los mosaicos, intenta plasmar mediante pinturas, diferentes escenas de guerra. Una niña escribiendo la palabra esperanza, un tres en raya donde las X representan los aviones de guerra rusos y sirios, y los círculos son los neumáticos que los niños de Alepo han estado quemando con el fin de crear cortinas de humo para despistar a los pilotos. Otro de ellos es un cañón que dispara rosas de sangre, y el último de ellos es una niña que entrega una de esas rosas a los que bombardean el país con la esperanza de que por fin se firme la paz.

El mayor éxodo de refugiados desde la Segunda Guerra Mundial, lleno de historias de guerra, sufrimiento y desesperación… pero también de superación, inocencia, valor y esperanza.

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